Powered By Blogger

lunes, 2 de enero de 2017

Marruecos, vecinos y amigos.

Poder viajar y escapar de la nebulosa que nos rodea en estos tiempos inciertos es una suerte inmensa. Empezar unas vacaciones en el norte de Marruecos y pasar el Año Nuevo en la frontera con Portugal es una suerte. Tambièn dejamos todas las comodidades del "mundo moderno" en Màlaga. Hasta el tipo de tilde.
Aquì en España se esperaba que DAESH atentara, y se blindaron las principales ciudades para recibir a 2017. Pero de nuevo fué una de las ciudades màs bellas del mundo y a la que tuvimos la suerte de visitar en nuestra luna de miel, hace ya unos cuantos aniversarios.

Me entristece mucho ver y leer sobre todo en redes sociales, como a unas personas que tienen distinta cultura que nosotros, pero que tienen la misma sangre, por su convivencia con nosotros durante ocho siglos, se les trate con desprecio y descalificativos. Eso no.

Marruecos nos ha tendido los brazos, nos ha protegido, nos ha ofrecido todo lo mejor de ellos, no puedo hablar mal de paìs vecino, no puedo hablar mal. A nadie le gusta que le traten mal, a ellos tampoco y a nosotros tampoco. Creo que se han tendido puentes de amistad. Puentes de intercambios culturales, que se haràn realidad cuando Dios quiera.  Creo que todos los buenos musulmanes, el marroquì de bien, terminan su saludo de despedida con "si Dios quiere".

Pués si Dios quiere, volveremos para contaros. No para convencer a nadie de que intolencia es fruto de algùn prejuicio enquistado.  Contar nuestras vivencias. Porque para hablar hay que conocer, vivir, convivir. Y acercarnos y dejar que se acerquen. Cierto es que corren malos tiempos, donde el fantasma del radicalismo sobrevuela por nuestras cabezas, no todos los musulmanes son radicales, ni todos los europeos unos santos con peana.

Y empieza un nuevo año donde todos son whatsapp con felicitaciones de copypega, ñoños comentarios en redes sociales, deseando idìlicos sueños, copiados unos de otros pero sin base sòlida. Cuando la realidad es que hubo un atentado en una ciudad de mayorìa musulmana. Estambul, se olvidò en Facebook. Como dirìa una persona conocida, "eso està muy lejos", lo que si estaba cerca era la amenaza sobre España,  pero el despliegue de seguridad, tan mediàtico como efectivo, hizo que no se produjese ninguna desgracia. Gracias a Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario